Diez Ideas para decorar un despacho

Tanto si tienes un despacho en casa, como si está situado en tu lugar de trabajo, siempre es un plus dotarlo de una decoración agradable que haga nuestro día a día más llevadero. Con la pandemia, el teletrabajo se ha convertido en una realidad cada vez más implantada en nuestro país, obligándonos a disponer de un espacio de trabajo en el que realizar nuestra actividad.

Para ello, es preciso encontrar el lugar idóneo para situar nuestro despacho y pensar en una decoración acorde a nuestras necesidades y a nuestros gustos. A lo largo de este post os vamos a dar una serie de ideas para convertir tu lugar de trabajo en un agradable espacio en el que concentrarte y trabajar. Toma papel y lápiz y no te pierdas detalle de todo lo que vamos a contarte.

1.       Elección de la mesa

A la hora de elegir la mesa de nuestro despacho tenemos que tener en cuenta varios factores, como el estilo decorativo que vamos a querer implementar en nuestro espacio de trabajo, el tipo de trabajo que realizamos o los metros cuadrados con los que contamos.

Hoy en día, existe una gran variedad de mesas en el mercado, así que tan solo tendremos que elegir la que sea más acorde a nuestras necesidades. Si contamos con un despacho grande, podremos elegir una mesa más amplia que nos permita trabajar más cómodamente. Por el contrario, si nuestro espacio es pequeño, tendremos que hacernos con una mesa pequeña, pero con cajoneras o espacios para poder guardar todos nuestros papeles y no dejar nada a la vista.

La elección de la mesa también tiene que ir acorde a la decoración del resto del despacho. Si nuestro estilo es clásico, tendremos que instalar una mesa de líneas más conservadoras, al contrario de lo que haremos si la decoración es más moderna.

2.       Elección de la silla

Una buena mesa de escritorio debe ir acompañada de una buena silla que la complemente y que nos garantice una comodidad a la hora de trabajar. Normalmente pasamos muchas horas sentados delante del ordenador, por lo que es necesario invertir en una buena silla que no nos provoque futuras dolencias para nuestra salud.

En Ibersillas disponemos de un gran abanico de sillas ergonómicas que nos ayudarán a crear un espacio de trabajo cómodo y funcional. A la hora de elegir nuestra silla de escritorio, tenemos que tener en cuenta que su diseño cuadre con el del resto del despacho, además de cumplir con una serie de requisitos para que nos resulte lo más confortable posible: debe adaptarse a las formas del cuerpo, contar con materiales transpirables, reposabrazos y respaldo ajustables…

Si optamos por una silla no ergonómica, podemos colocar cojines mullidos que le doten de mayor comodidad.

3.       Elección de la lámpara

Aunque lo ideal es colocar nuestra mesa de escritorio cerca de la ventana para podernos asegurar una buena luz natural, es necesario colocar una lámpara con la que iluminar puntualmente zonas concretas de trabajo.

Dependiendo del tamaño de nuestro despacho, podemos instalar una lámpara principal (de pie o de techo), así como algunas auxiliares para crear una atmósfera más tenue que no aporte reflejos en la pantalla del ordenador.

En cuanto al diseño de la lámpara, también dependerá de la decoración que hayamos elegido para nuestro despacho. Para una decoración clásica, existen lámparas más sobrecargadas, mientras que, si optamos por un despacho moderno, podemos hacernos con lámparas de líneas sencillas que no ocupen mucho espacio y que aporten un plus en cuanto a diseño se refiere.

4.       Elección de estores o cortinas

Ya hemos comentado en el apartado anterior que lo mejor es optar siempre que se pueda por la luz natural. Por tanto, la elección de los estores o cortinas con los que vamos a decorar nuestro despacho es sumamente importante.

En el mercado actual existen ya cortinas capaces de modular la temperatura del ambiente, además de la luz, aunque suelen tener un precio más elevado. Si no contamos con un presupuesto muy alto, tendremos que optar por cortinas o estores que dejen pasar la luz natural, es decir, con telas poco opacas, que a su vez aporten la privacidad necesaria de cara al exterior.

5.       Archivadores y otros organizadores

Un despacho bien organizado siempre es mucho más inspirador que otro lleno de papeles o cosas por el medio. Para tener todo recogido, es recomendable hacerse con archivadores u organizadores que permitan tener todo a mano sin dar sensación de desorden.

Podemos aprovechar la superficie del escritorio para colocar cajas y botes con todos nuestros imprescindibles, o colocar algunas bandejas con archivadores para mantener todo el papeleo a raya. En las paredes, también podemos colocar alguna estantería para libros o algún pequeño elemento decorativo.

6.       El color de la pared

Sabemos de la importancia que tiene el color para cualquier estancia y nuestro despacho no iba a ser menos. Los colores tienen gran influencia en nuestro estado de ánimo, por lo que debemos elegir unos tonos que nos permitan concentrarnos y nos aporten la calma y la tranquilidad necesarias para desarrollar nuestro trabajo de la mejor manera posible.

Debemos elegir colores con propiedades calmantes, como el azul o el verde, aunque siempre es una buena elección apostar por tonos claros como el blanco o el rosa. Sea cual sea el color elegido, tendremos que tener en cuenta el estilo del resto el despacho, para combinarlo con otros elementos.

7.       Alfombras y tapicería

Las alfombras sirven para adornar o destacar un determinado espacio de la habitación. Es muy recomendable elegir una para nuestro despacho, ya que le aportará mayor calidez a la estancia y sumará puntos en nuestra decoración.

Dependiendo de nuestro estilo, podremos optar por alfombras clásicas o por otras más modernas de rafia o de pelo largo, con colores claros para dar mayor luminosidad a la habitación.

8.       Accesorios decorativos

Los accesorios siempre con un complemento perfecto para la decoración de cualquier estancia. En este sentido, podemos jugar con los colores y las texturas para crear un espacio personal y armónico.

Por ejemplo, si nuestro despacho está decorado con colores claros, podemos optar por colocar los accesorios con colores más vivos para realzarlo. Por el contrario, debemos elegirlos más neutros si ya hemos elegido una decoración más vistosa.

9.       Cuadros y fotografías

Los cuadros y fotografías siempre aportan calidez y dotan al despacho de personalidad propia. En el caso de las fotos, es muy habitual que sean de familiares del trabajador. Podemos ponerlas en un bonito marco encima del escritorio, dejando así espacio en las paredes para los cuadros.

Dependiendo de nuestros gustos y estilo elegido para el despacho, podemos optar por colocar cuadros abstractos, reproducciones de obras de arte o cuadros en blanco y negro. El mejor lugar para situarlos es en las paredes, aunque también se ha vuelto tendencia apoyarlos en estanterías, una buena opción si no queremos hacer agujeros.

10.   Plantas

En la decoración de un despacho nunca debería faltar una bonita planta de interior, que aportará frescura y naturalidad al ambiente, además de reducir el estrés que puede producirnos nuestro puesto de trabajo. Lo mejor es elegir plantas o pequeños árboles que no requieran de muchos cuidados y colocarlos en un lugar visible y que no nos moleste en nuestras actividades diarias.